martes, 16 de febrero de 2016

MI VIDA ES UNA CHANCLA: "El día que descubrí a la "Pelopony"

No es cosa de misterio de que el panorama televisivo yace en los estercoleros del detritus humano. No es menester que se plasme algunos ejemplos para saber a lo que nos referimos pero con uno,tan solo bastara, para que sepáis, los mas confusos, de lo que vengo a hablar hoy.

Me encontraba deambulando el otro día por mi casa, acomodándome en mi sillón de confianza y practicando el deporte nacional por excelencia con nombre extranjero (Zappeando). De esto hace ya bastante tiempo ya, lo que pasa que utilizo esa medida de tiempo (El otro día) para referirme para acontecimientos comprendidos entre ayer y hace 10 años.

En la caja boba no había nada interesante en la franja horaria en la cual me encontraba. De repente, preso de haber perdido la noción del tiempo, me di cuenta que me encontraba en TELECINCO
( Zusto,zusto) por el programa que los patrocinadores daban paso después de anunciar sus productos.

El programa no era otro que SUPERVIVIENTES. Me puse nervioso. No sabía cómo había llegado hasta ahí pero a lo hecho pecho, aun no era demasiado tarde para cambiar de canal y empezar una vida nueva.
El mando optó por hacer huelga de botones caídos y dejar de funcionar. La cabecera del programa hacia acto de presencia. Ya estaba mostrando los principales indicios de subnormalidad cuando, en vez de cambia las pilas, golpeaba el mando como cuando el Homo Erectus golpeaba los huesos en Odisea en el Espacio.

Mi famosa paciencia empezó a descender en caída libre mientras que picores de todo tipo me invadían, desde la espalda hasta la rabadilla de Krauser (El culo)

Es relevante que la televisión y el sillón estaba separados por un escaso metro noventa pero si nuestros compatriotas chinos, japoneses y coreanos invirtieron miles de millones en tecnología punta, hay que darle uso si o si. Levantarse a cambiar de canal es una frase que va precedida de colores en blanco y negro.

“No se vayan todavía, aun hay mas” como dijo tantas veces Super Ratón, fue lo que pensé al ver a Jorge Javier Vázquez dando la Bienvenida a los espectadores del programa. Jure y perjure que el mando iba a volar por la ventana si insistía en su tozuda negativa de no funcionar.

Golpe tras golpes y pulsando todos los botones como un esquizofrénico con un bollicao, el único que seguía en pleno uso de sus funciones era el de elevar el volumen del aparato.  “Tímpanos reventados y estupidez irreversible con un babeo puntual de lunes a domingo”. Ese iba a ser el diagnostico que el médico forense daría a mi pobre madre cuando encontraran mi cuerpo.

Todo estaba perdido y mi escasa dignidad hizo que me propusiera a levantarme y volver a los años 60 para cambiar de canal. Una costumbre no practicable en mi casa desde que paso algo parecido, otra vez, con el mando pero en vez de Telecinco el canal era la Taquilla X.

Mis piernas crujieron al estirarse, estaba listo para caminar hasta el fuego que calentaba mi casa, la televisión. Cuando mi dedo hizo contacto con el botón y estaba dispuesto a presionarlo, el presentador dio paso a la isla para hablar con alguien en concreto.

Se hacía llamar: “LA PELOPONY”

Y ahí estaba yo. De pie, con la boca abierta y los ojos como platos mayoneseros al ver la chica que se ocultaba detrás de ese seudónimo.

“Me iba a ir, ahora me quedo” fue lo que pensé. No por ser adicto al sado sino que quería creerme lo que mis ojos no daban crédito.  Acto seguido investigue el tema, más de cerca y aquí estoy.
Ah, por cierto, estoy tan solo ha sido un epilogo.

-Coge  silicona de la mejor calidad que encuentres. Échalo a una batidora.
-Introduce 30 gramos de muñeca Barbi.
-Extensiones rubio pollo.
-Canijazo del 15
-Rinoplastias.
-La escopeta maquilladora de Homer Simpsons.
-Dale a batir y mientras lo hace, introduce un habla que alterne un B1 de inglés “Magic English” y un español nativo que aun le persigue el suspenso, en lengua, de cuarto de la ESO.
-Déjalo reposa un minuto y ahí tienes a nuestra protagonista del blog de hoy. Bon appetit.

Durante mi exhaustiva investigación lo pase canutas para encontrar información alguna sobre “ella”. Tengo entendido que SUPERVIVIENTES era antiguamente conocido como “la isla de los famosos” por tanto para que el formato funcionara debías de ser una celebridad en un determinado campo pero para mí que esta “chica” no era conocida ni donde era asidua a comprar el pan.

Más tarde, me entere de que era cantante. Si, el panorama televisivo esta tan hecho polvo como el musical pero oye, la chica le pone empeño y cariño a las cosas que hacen. También Hitler pondría empeño en lo que hacía y no se le recuerda, precisamente, por ser un modelo en la consecuencia de su sueño.
Hay un programa de becas que TELECINCO ha sacado. Las Becas “Sandovalizate” brindan una pequeña oportunidad a aquellos que sin ser cantantes quieren triunfar en ese mundo lanzando un sencillo de una sola canción. El handicap que existe es que la mayoría de los usurarios de estas becas cantan menos que la gaviota de la “Sirenita”

Pero esto ya es arena de otro costal, quizás le dedique unas líneas en un futuro en este blog, pero unas pocas nada más.

Picado por el bichito de la curiosidad desde pequeño quise saber de qué género eran los temas musicales de la susodicha. No hay ni una vez que no me cague en los muertos del condenado bicho que le dio por poner sus huevos en mi interior.
Aquí os dejo unos enlaces para que vosotros mismos veáis el calibre de tal despliegue de medios. Personalmente, me quedo con los momentos interpretativos antes de que la música empiece a sonar. Tengo entendido que tiene dos nominaciones a unos premios (No se cuales), cada videoclip, por actores y actrices revelaciones y por la fotografía que rivaliza con los planos de las películas porno de Torbe.



Si sois valientes y aguantáis hasta el final, entráis en el sorteo de una reconstrucción de bulbo raquídeo. “¡Aquí no ha pasao na!”

Bueno, voy a formatear el ordenador que me han entrado no se cuantos virus por buscaros los enlaces y la foto...mierdas


lunes, 15 de febrero de 2016

MI VIDA ES UNA CHANCLA: "El día de las notas"

“…maldita será la tierra, por nuestra culpa. Porque caldos y espinos producirá para nosotros, pues de la tierra fuimos tomados porque polvo somos y en polvo nos convertiremos”

Hola que tal mi vástagos del bien. Siento el abandono producido hacia vuestras personas pero las obligaciones del universitario no solo se reducen a este blog, por desgracia. No intento escurrir el bulto. Nada más lejos que Albacete.
Ha sido un mes duro, aunque espero triunfar en lo alto de una roca granítica con una espada levantada y una melena inexistente ondeando al viento.

Los estudios me ha apartados de ustedes y como el principal motivo esta puerto en tela de juicio, hoy vengo a hablaros de las consecuencias que acarrea enclaustrarse para un fin loable, como es el de labrarse el futuro.

La cita bíblica inicial introduce, a groso modo, lo que pretendo transmitir.

“El día de las notas”, era, para algunos por excelencia, el día en que los mares se abrían, la tierra se agrietaba y bolas de fuego caían del cielo, arrasando todo aquello con lo que colisionaba. Para otros, era alto en el camino para un merecido descanso, con un sabor, únicamente, comparable a los cortadillos de sidra.

Era el día en que se veía todo el trabajo realizado durante los distintos trimestres.
Algunos lloraban de la alegría al ver que el esfuerzo merecía la pena. Otros, por el contrario, lloraban por las consecuencias que traía su desidia prolongada durante el espacio y tiempo.

Hay dos tipos de personas, catalogadas en un ranking inventado y patentado por mí:
Ø  Los alumnos cuyos padres recogían las notas de sus hijos,en un día especificado, únicamente, para ellos. Por norma siempre era un jueves a la hora del café ((A la hora los toros)
Yo, por el contrario, partencia al otro grupo:
Ø  Los alumnos que recogían las notas, personalmente, por la mañana. Siempre eran un viernes. Desde entonces, cuando llegaban las vacaciones de Semana Santa, comprendimos el significado del catalogado “Viernes de Dolores”

¿Dónde radica la diferencia de estos dos grupos?

La diferencia más visible a primera vista  reside en el receptor del  boletín, obviamente.
Se podría decir que es la única existente. No hace falta ser un “licenciao” para verlo a la legua, que os ponen un 10 en religión y vais pregonando lo superdotados que sois.

Ventajas e inconvenientes:

·         VENTAJAS de que tus padres recogieran tus notas:

1.      Si tenias dos dedos de frente y no vivías engañándote o encomendándote al espíritu santo para que, por obra de un milagro, hiciera desaparecer 8 suspensos de ese informe, te daba tiempo en, el tiempo en que tus padres estaban fuera, idear un plan de fuga, exiliarte a un país sin tratado de extradición o la construcción de un bunker seguro, a salvo de las consecuencias que estaba por venir. “ Quien siembre tormentas recoge tempestades”

2.      Iban a ser a tus padres quien le iban a poner la cara colorada sobre tu deficiente trabajo y no a ti. Incluso poniendo en entredicho, alguna vez que otra, la educación que recibías por su parte por algunas malas contestaciones a algunos profesores o amenazas de muerte con arma blanca en el cuello, incluido.


3.      Ibas a ser conocedor antes que algunos de tus compañeros que habían optado ser perteneciente del segundo grupo. Los palos cuanto antes se den, mejor.


·         INCONVENIENTES:

1.      Algunas veces no era posible abandonar el país, ya porque fueras menor de edad para viajar solo, no tuvieras dinero suficiente para hacerlo o no tener donde caerte muerto en caso de fugarte. También se le podía añadir que tus conocimientos de arquitecturas eran tan escasos que solo te habían podido permitir construir un bunker, paupérrimo, con algunas sabanas de franela y una caja de agua “Lanjaron”. Insuficiente para sobrevivir a la onda expansiva de esa bomba nuclear en forma de padres.

2.      Eran tus padres quienes  recibían los coloretes de tu maestro por tus suspensos, pero si ellos son capaces de recordar tus travesuras cuando eras un infante de teta, lo que han oído hace media hora no va a ser menos. Además, el agravante está en que, mientras marchan juntos  para tu casa, a tu encuentro, hablan entre ello y el odio, la inquina y la animadversión hacia ti se incrementa a la vez que salen trapos sucios tuyos del pasado.

3.      Cuando regresan a casa, estas indefenso, con un billete a la Patagonia que no has podido comprar por falta de liquidez, un bunker que se va al carajo con un soplido  y  con una cara de “gatito con botas” que incita mas al linchamiento que a la ternura. Tus padres se te echan al cuello pero no de uno en uno, no, a la vez, con saña y tremebosía . No sabes cuál es la voz de tu padre y la de tu madre. No sabes diferenciarla entre ese batiburrillo de rebuznos y gritos de jaguares. Tienes una oreja para cada uno de ellos mientras te limitas a mirar al suelo, porque poner los ojos estrábicos no te sale. La cosa se complica cuando,  tu padre o tu madre, increpa a la otra parte con una frase que cuando la oíamos, deseábamos ser topos y cavar un túnel en el suelo y llegar hasta china y celebrar el año nuevo del mono: “PO LA CULPA LA TIENES TÚ”.

Huye, huye porque los leones que despedazaban a la gacela se empiezan a pelear entre ellos y eso no significa que no estén enfadados contigo ya. Ahora , todo ser vivo que viva en esa casa se convierte en el blanco de la ira de esos padres enemistados por el niño que yace a la deriva del fracaso escolar.

4.      Ser conocedor de las notas antes que algunos amigos estaba bien, pero alargar la agonía una 12 horitas estaba bien. Recuerdo que ,si las recogía el viernes, tal como llegaba del colegio el jueves, me encerraba en mi cuarto y jugaba a la Play Station hasta que el motor oliera a quemado y el Crash Bandicoot me pidiera una bebida isotónica y un descanso.

·         VENTAJAS de recoger las notas tu mismo.

1.      Era un procedimiento quirúrgico. Llegabas, recogías y salías.

2.      Te encontrabas con compañeros cercanos.

3.      Te reías comparando los suspensos, a ver quien había sacado más y quien menos.

4.      Te despedías de los profesores que te caían bien.

·         INCONEVNIENTES:

1.      Algunas veces no eran tan quirúrgicos los procedimientos. Te citaban a las 9 de la mañana y hasta las 12 no venia tu tutor a entregártelas en mano.
La espera era horrible. Algunas veces, optábamos por ir buscando a los profesores de cada asignatura e íbamos comprobando si la teníamos aprobada o suspensa. Así ya sabíamos con que nos íbamos a encontrar y no dejábamos lugar a las sorpresas.

2.      Te encontrabas con compañeros cercanos, lo que significaba que, hasta el último día del trimestre, te acababan llamando la atención por alguna gamberrada en lo que duraba la espera larga y aburrida.

3.      Te reías cuando te daban las notas con todos tus suspensos y la comparabas con tus amigos. El camino de vuelta a casa, ya te digo yo que no te reías tanto. Además, daba la casualidad que todos tus amigos vivían en la otra punta de la ciudad en la que vivías tú, por tanto, las risas que ocurrían dentro del colegio no se podían alargar hasta la casapuerta de tu casa.

En otro orden de cosas, mi madre tenía el poder de saber en qué momentos mis dedos hacían contactos con las notas y dejando 30 segundos de comprobación y asimilación de los suspensos, me llamaba al móvil. No daba ni los “Buenos días”, tan solo se limitaba a preguntar: ¡¿Cuántas?!

4.      Te despedías de los profesores que te caían bien y, casualmente, eran ,también, los que te habían suspendido. Por lo tanto, eso era uno de los momentos más tensos que un alumno podía experimentar. Nos sentíamos Jesucristo rodeados de Judas los cuales, en algún tiempo atrás, admirábamos y respetábamos.




CONCLUSIÓN:

Con esto, termino mi ponencia sobre pros y contras de ese “día” que, a pesar de que pase el tiempo, sigue siendo una parte de nuestro pasado que aun está muy latente, por desgracia.

Revivirlo sería, sin duda, algo prometedor para nosotros pues, de buen seguro, no cometeríamos los mismos errores del pasado, con la experiencia que tenemos ahora.

Al mismo tiempo expresamos un: “¡Que pereza!”,mientras resoplamos si tuviéramos que vivirlo de nuevo.

¡PALABRA DE DIOS!